El abogado del detenido, un suboficial del Ejército, asegura que su defendido fue presionado por Nelson Romero antes de asesinarlo. Solicitará cambiar la carátula del caso, y afirma que la confesión realizada ante la policía no tiene validez legal.

La comunidad de Santa Cruz sigue impactada tras el hallazgo del cuerpo sin vida de Nelson Romero, empresario de seguridad de 56 años, en un descampado del barrio Ayres Argentinos, a unos 10 kilómetros del centro de Río Gallegos.

El suboficial del Ejército, José Daniel Cabrera Gallardo, de 27 años, ha sido detenido por el homicidio y su abogado, Jorge Trevotich, reveló detalles cruciales sobre el supuesto móvil del crimen, que involucra un chantaje con «material fílmico» que Romero habría utilizado para presionar a su cliente. Según Trevotich, Romero habría amenazado con ese material para impedir que Cabrera trajera a su esposa e hija desde el norte del país a Río Gallegos. Además, Cabrera confesó a la policía, señalando la ubicación del cuerpo a través de Google Maps, pero su abogado insiste en que dicha confesión no tiene validez legal, ya que no fue realizada ante el juez subrogante Fernando Zanetta, quien lleva la causa.
El abogado también sugirió que Cabrera y Romero se conocían desde antes, habiendo mantenido contacto a través de redes sociales, lo que podría indicar que no se trató de un encuentro casual. Además, se ha revelado que después del asesinato, Cabrera utilizó el teléfono de Romero para realizar una transferencia de 500 mil pesos, aprovechándose de que tenía acceso a las tarjetas del empresario.
Trevotich adelantó que pedirá el cambio de carátula del caso, ya que considera que no fue un homicidio agravado, sino que existirían atenuantes que se harán evidentes cuando Cabrera declare formalmente ante el juez. El abogado planea presentar un escrito este sábado para que su cliente sea indagado lo antes posible. Mientras tanto, la justicia ha incautado los teléfonos celulares de ambos implicados, donde podrían encontrarse más pruebas que arrojen luz sobre este complejo y horroroso caso.
Fuente: Nuevo Dia.